sobre la altura mínima de las atracciones
Publicado: noviembre 25, 2010 en cuentos para enfants terribles, currele, historias de la mera muerte, inocencia, lápida, microcuentos, sangre, trenesTiene cuatro años y lleva a la muerte cogida de la mano. De la otra un globo rojo y un helado; de tres bolas.
historia de un niño de cinco años
comentarios
¿Sabes lo que me ha fascinado hoy?
..pestañas largas como un día sin tele.
…tan vieja como el último suspiro del primero de los seres vivos
…con su bigote de nata, pistacho y turrón.
Has estado descomunal con las metáforas. Bravo.
no hay metáfora que te haga justicia, pecs.
así da gusto empezar el día.
😀
Me encanta ese bigote de nata, lo que no me gusta nada, es la sonrisa de la muerte. Muy buen relato. Un fuerte abrazo
a la muerte le es imposible no sonreír, maite. aunque la cosa no tenga puta gracia.
un abrazo hasta que cruja.
Además de las metáforas, a mí sí me gusta la sonrisa de la muerte, siento que en este micro la humaniza. Como también siento que en este micro es algo bueno ser humano.
a veces, por mis micros, la muerte me parece un/a niño/ grande.
el ser humano ni es bueno ni malo es, en esencia, humano, patricia.
un placer volver a leerte.
Lo que nadie sabe es que a la muerte no le molan las montañas rusas, está harta de que salgan en las películas, los infartos, los recoge una vez el coche está parado. Pasa de subir por los andamios xD
estoy contigo, ya que han pagado por lo menos que terminen el viaje.
Eres tan tierno cuando quieres, Vittt.
la carne se ablanda a golpes, ann
La muerte es siempre tan exquisita bajo tu pluma.
Me quito el sombrero.
pese a mi exquisita pluma me gustan las mujeres con sombrero. y sin él.
Un micro cargado de imágenes muy vivaces, Vittt, a pesar del tema. En otros microtextos tuyos ya he encontrado esa radical naturalidad en la escritura que te permite hablar del propio texto sin pestañear. Esto es muy propio de la literatura norteamericana quizás porque la hacen los propios norteamericanos, gente muy franca y muy sencilla en general, muy directa también. Me resulta muy agradable ver en este micro esa mirada cristalina que supongo igual a la tuya.
Abrazos fuertes,
PABLO GONZ
uno no escribe como quiere sino como puede, pablo, incluidos los americanos 😉
la mirada cristalina es porque llevo gafas.
brindo por tu pronta recuperación.
¡Me encantan tus descripciones y tus cuentos con niños y la muerte!
la muerte y los niños maridan estupendamente. la muerte y los muertos, en general. hablo de ellos porque me resultaría insoportable relatar el dolor de los que quedan.