El heterosexual no-practicante comprendió que el círculo de luz era inalcanzable, allá arriba. Había miles como él, quizá millones —de hombres y mujeres—, mirando como el círculo de luz empequeñecía hasta alcanzar el diminuto tamaño que tenía cuando, tras años de absurdo reparo homófogo, el heterosexual no-practicante acertó a meterse el dedo en el culo y —para su goce y espanto— no pudo parar.
—¿Y ahora qué? —preguntó, asustado.
Una mujer bellísima le cogió de la mano, susurrando:
—Ahora, la oscuridad.
La Inspiración.
Un programa radiofónico sobre sexo. Tema del día: Fantasías Inconfesables; que los oyentes confesaban sin ningún rubor.
jajajaja Una vez mi abuelo dijo: “nada más incómodo que pensamientos homosexuales”
Muchos heteros no-practicantes piensan en eso, y otros practicantes también xD
“Ahora, la oscuridad” No hay nada más sugerente en labios de una mujer hermosa.
(me quedo con ganas de saber qué pasó después… ah, la curiosidad…).
Solo cuatro palabras me parecen más sugerentes todavía en labios de una mujer:
-No tengas miedo, ven.
Mmm, sí… no tengas miedo” es mucho más sugerente…
cómo para no ir, eh?
Ideas malignas se pasean por mi mente… sí, es muy sugerente. jajaja
Por lo demás, ¿no dirás lo de “ahora, oscuridad” porque no da el sol; o es porque se aficiona uno a los armarios?
pasapalabra
Ah, el dedo en el culo, uno de los grandes tabúes de los hombres:
–Ven, no tengas miedo
-Uy, nonono, a ver si me va a gustar…
Y sí, de eso se trata, ¿no? El heterosexual no-practicante dio un gran paso que muchos no osan. Eso sí que es ser un macho, bravo.
el dedo en el culo? depende del dedo. para empezar tiene que estar muy limpio.